miércoles, 19 de marzo de 2014

Capítulo XLII (Un invierno mas, Un mundo nuevo)



24 de diciembre de 2021  05:00hrs
Xibalba, Mexico




Nos despierta el agudo pero lejano sonido de las sirenas en la ciudad Aura no se levanta, asi que solo encendemos el radio conectado con Mariana, Andy parece somnolienta, mientras la ayudo a vestirse, la pequeña de 6 meses aun la despierta seguido para comer, lentamente la beso con dulzura, y con su adormilada lucidez, me devuelvo el beso mas apasiondamente, tomandote del uniforme pegandome a su cuerpo calido por el sueño y abrazandome con sus piernas, la adormilada pero ardiente pasion de mi esposita es demasiado para mi, y me dejo llevar por ella, besandole el cuello y abriendo su traje de nuevo, para dejar al descubierto sus senos, besandolos mientras la siento arquearse hacia el espejo del tocador, donde la apoyo, murmurando sin mucha voluntad.


-Deberiamos ir a la ciudad a ver que pasa princesa-

Ella aprieta mi cabeza hacia entre sus senos, y murmura con los dedos enredados en mi pelo y la respiracion ligeramente jadeante, mientras terminar por desabrochar mi pantalon.

-No creo que la ciudad vaya a caerse en 5 min, ademas, quiero mi regalo de navidad-

Pegandome mas a su cuerpo, mientras ella da un delicado gemido, nos unimos de golpe, con una fuerte embestida que hace moverse el tocador por completo, mirandola a los ojos mientras nuestra pasion se desborda en embestidas profundas, y llenas de amor, cuando llegamos al extasis mirandonos a los ojos, ella suspira he intenta acomodarse el uniforme, mientras sonrie traviesa.

-Espero acabes de despertarme asi siempre-

Aun con la respiracion agitada la guio de la cintura para subir el Jeep recorrer el tramo que no separa de la ciudad principal, al llegar, la general Joy y Miriam estan frente a la plaza.

-Hermanos sobrevivientes, como el año pasado la general y yo tenemos planeado hacer un evento para navidad pero necesitamos su ayuda, los grupos de elite como Bushido, la UICREM, los hemofagos, y el grupo de nuestra compañera Sasha, guiaran a 3 equipo de voluntarios para realizar tareas para nuestra primera navidad como ciudad libre de infectados-Dice Miriam con un microfono en la mano, mirando a todos, rapidamente los grupos que menciono estamos alli.

Al terminar Joy nos organiza.

-Los Bushido se repartiran en equipos para ayudar a los 3, pór  el momento lo objetivos mas importantes son

-Recuperar juguetes para los niños que han nacido desde la crisis

-Acompañar a los equipos de tala, por los arboles de navidad, incluyendo el enorme que queremos para la plaza

y sobre todo

-Patrullar la zona para que no seamos molestados por infectados- al terminar la general sonrie.

-Nos encargamos de los infectados mama- murmura Angela, y Aika sonrie

-Ire con mi novio junto con ellos, creo que seremos suficientes-

-Claro-repone la general-entonces Gustavo, Acompaña junto con Andy y Raven a los UICREM por los juguetes-

Sonrio y abrazo Andy por la cintura, que se sonroja al notar las miradas de complicidad de todos al notar nuestras ropas desarregladas.

-Claro general, cuente con nosotros, pedire a UIAZ que nos facilite las ubicaciones de los almacenes mas cercanos y los mas abastecidos-

-Bien. entonces el equipo de Sasha junto con Valeria y Jonathan iran acompañando al equipo de leñadores-

-El bosque es lo nuestro hermanas- murmura Sasha abrazando por el cuello con un brazo a cada una, a Valeria y a una chica se su grupo-





Al terminar la pequeña reunion nos preparamos, las UICREM son sorprendentemente casi en su totalidad mujeres, casi todas de la edad de Sophie o un poco mas grandes, sus ceñidos trajes blancos, totalmente blindados y protegidos les dan el aspecto de una aparicion, ademas de un detalle estetico que vi a Sophie quitarse al subir al helicoptero durante el asalto de Lecumberri, una capa  blanca preparan sus armas con mucho cuidado, subametralladoras MP5  con silenciadores, al igual que pistolas  Beretta 92-F con silenciador y automaticas, mientras las veo prepararse sonrio, son buenas muy seguramente, mi corazon toma una pesada ametralladora, mientras cargo con mi XM-8 version de tirador, un pesado trailer nos espera, subimos con rapidez, sorprendida por la cuidada efectividad con que las UICREM lo hacen, el camino es largo, los almacenes de los grandes cadenas de centro comerciales estan en la ciudad de mexico, aun asi, llegamos a medio dia, mi principe vuela en candado mientrs ordena.

-Agrupen todo por grupos de edad, no debe quedar ningun niño sin juguete, y lleven igual cantidad para niños que para niñas- 


Nos quedamos fuera mientras Raven sube al techo, para cubrirnos a todos, despues de echar al camion una muñeca para su hija, yo no puedo evitar sonreir y tomar una osita de peluche con un enorme moño rosa, en total, todo el juguete debe estar tan grande como Aura, pero decido llevarlo, envolviendolo en una bolsa antes de mostrarselo a mi corazon.

-Mira amor, para Aura-

El me abraza por la cintura y me besa dulcemente, mientras me pego a su cuerpo, dejandome llevr por el humedo y calido beso.

-Es linda, seguro le encantara-

El cargamente va por  mas de la mitad despues de una hora y parece que todo saldra bien, pero Raven grita por la radio, mientras comienza a disparar. 

-Tenemos compañia hermanos, una horda de aproximadamente 700 infectados se acerca por la avenida principal- 

Tomamos las armas, dejando solo a las mas fuertes acarreando las pesadas cajas, los UICREM forman filas compuestas de fuego, en dos lineas, para mayor efectividad,  apunto desde el hombro, aunque cada disparo sacude demasiado mi espalda, derribo rapidamente a varios de ellos, mi principe espera con la ametralladora en la cintura, para disparar junto a las UICREM en el momento que los infectados estan a 15 mts, todos abren fuego, derribando oleada tras oleada de infectados, algunos, mientras nos concentramos en eso, algunos raiders empiezan vuelven encima de nosotros, levantando por los hombros a dos de las oficiales, Raven derriba a uno y deja caer a la chica, que malherida por la caida de dos pisos se queja de dolor, pero la otra es despedazada por los raiders en el aire mientrasl es disparamos, la mitad de nosotros a ellos, y la mitad a los zombies que no dejan de llegar, como siguiendo una señal divina, pero obedeciando realmente una seña de mi corazon, las UICREM lanzan un puñado de granadas a los infectados que vienen, el camion esta listo, subimos y arrancamos mientras Raven brinca el techo, jadeante por el esfuerzo y activamos las defenzas del trailer, despedazando a los infectados que encontramos a nuestro paso. 



Equipo numero dos, Capitana Valeria

Lentamente el andar pesado del camino de carga nos parecio eterno, pero yo sentada en las piernas de mi Jonathan apenas senti los baches de la carretera, su pecho es firme y calido, eso me encanta,  y su corazon late mucho mas lento que el de los humanos cuando esta calmado, el tararea una cancion muy bajito, nuestra cancion, sonrio como una niña y me acurruco al escucharlo



Los camiones paran, y bajamos son suavidad, Jonathan me ayuda a bajar con facilidad, paresco una niña en sus brazos, pienso que eso me gusta mordiendome los labios un poco, pero nos ponemos profesionales, condusco a los taladores hasta un inmenso arbol en el centro del bosque en el que no encontramos, es enorme, pero Jonathan nota algo antes de que los taladores enciendan las sierras electricas


-Amor, ¿esas no son marcas de arañazos?- me murmura con su habitual voz ronca, debo esforzarme para concentrarme en ella y no en la cecania de su enorme y calido cuerpo, eso son, y grandes.


-Eso parecen pero no se de que- contesto


El saca un pesado cañon 30mm adaptado para funcionar como una especie de rifle de asalto para el, los leñadores que no operan las sierras, toman sus hachas, o pistolas preparandote para lo peor, el ruido de las sierras llena el ambiente, y comienzo a sentir un poco de miedo, alguns infectados llegan en pequeñas hordas de 4 o 5, pero los abatimos rapidamente, Jonathan ni siquiera a necesitado disparar, pero un gruñido sordo interrumpe la dulce mirada que le dirigo, y noto lo que viene, dos mother flanquean a una poderosa Wraith con sus tentaculos moviendote entre los arboles, tomando mi rifle de asalto gritp por encima del ruido.

-Jonathan disparale a la loca, nos encargamos de esas madres-


El asiente y se mueve con su sorprendente agilidad entre los arboles manteniendo a raya a la criatura con el cañon, sus movimientos son agiles y parece que danzara con ella, pues intenta encontrar la manera de acercarse lejos de sus tentaculos, lo intenta, pero la mutagena lo derriba con un tentaculo y lo estrella entre dos, dejandolos mareado, pero aun disparando, mientras nuestros hombres se preparan esquivando los chorros de acido, algunas granadas vuelan hacia las madres, pero no acertan al mismo tiempo y ellas se regeneran rapidamente, tomo una, y les hago una señal, mientras ellos lanzan algunas a la boca que lanza acido mientras le retaco la boca con otra granada, al estallar, cae por completo, una gota de acido me golpea en el hombro, y me quito la armadura, y la blusa rapidamente, incluso ha llegado a atravesar el tejido y mi piel esta enrojecida, me cubro con un abrigo, pero solo con eso, mientras seguimos disparando, mis mejillas estan sonrojadas al maximo, pero en pleno ataque no hay tiempo ni animos para el pudor, por fin, logramos atinar otra granada bien a la boca del estomago de la mutante, mientras disparamos a la cabeza, cae fulminada, busco a mi amor con la mirada, pero no lo encuentro, comienzan a agolparse las lagrimas en mis ojos cuando escucho un silbido, nuestra clave, lo veo en la distancia, lleva a la mutante arrastrandola por los tentaculos, sin cabeza por los disparos , me sonrie mientras noto un corte en su mejilla, pero nada grave, pues mientras lo miro ya ha desparecido, me abraza mientras los leñadores terminan el trabajo y suben una fuerte cantidad de arboles al camion, la grua no puede el mas grande, asi que Jonathan la ayuda para que suba, luego, subimos al Jeep junto al trailer, para regresar a la base, intento ocultar la marca enrojecida del acido pero siendo su deliciosa mirada clavada en mi escote, asi que solo me acurruco un poco mas en su pecho.






Equipo 3, Mayor Aika Operativos Bushido


La verdad ninguno de los dos le gusta escribir informes asi que mejor lo hare yo, nuestra tarde fue lo bastante tranquila para ser aburrida, la patrulla inicialmente fue caminar por el bosque, me sorprendio ver que no localizabamos al equipo de Sasha hasta que lanzamos una bengala y se levantaron, los trajes de camuflaje de invierno les hacian parecer unos montones de nieve mas, y apesar de sus corta edad Sasha era mortiferamente efectiva, caminamos despacio, ellos casi arrastrandote en cuclillas para que no fueran visto por un posible enemigo o infectado. ante cualquier ojo curioso parecia que mi demonito y yo solo paseabamos, incluso le di la mano para que se viera mas realista, pero todo transcurrio con tranquilidad, hasta que nos paramos a descanzar a medio camino, Sasha hizo de sus trajes pequeñas tiendas camufladas, para no romper el camuflaje, parecian comodas, mientras tomabamos un poco de agua sin ninguna preocupacio, el zumbido de una bala me arrebata la cantimplora de las manos, saco mi pistola y regreso el fuego, mis potentes Desert Eagle gemelas siempre han sido mi orgullo, mi demonio saca su escopeta mientras notamos a un equipo de cercas de 30 a 45 hombres, son cloners, notamos cuando se acercan, pero al hacerlo, Sasha y su grupo se despliegan desde sus posiciones camufladas, cubriendonos con fuego tan intenso, que lo unico que debemos hacer es ir derribando a los que se cubren, paso rapidamente entre las balas gracias a mis nuevos sentidos hemofagos, amo ser asi, aunque el pelo morada me hace ver algo extraña, mi nueva forma me ha permitido ser mucho mas fuerte que nunca, saco mis dagas, y comienzo a derribar los cloners que no son alcanzados por el fuego, sonrio fugazmente al notar la mirada de mi demonio sobre mi cuerpo, siempre le ha gustado que pelee o baile para el, doy gracias en silencio por mi cuerpo agil mientras termino al ultimo de los cloners,el pesado fuego de su escopeta terminar por derribar a los ultimos cloners, pero es demasiado tarde, gracias al fuego tenemos de nuevo a los infectados encima, ragnaroks, debieron comenzar a hacer manadas debido a nuestros puestos de control en las carreteras principales.

-Malditos bastardos-oigo que murmura mi demonio mientras comienza a dispararles, se mueve con agilidad, y destroza a cada uno de los ragnaroks de cercas, a quemaropa

Mientras yo quedo entre el fuego de los lobos de Sasha, y nuestro nuevo enemigo, saco mis otras pistolas, las potentes armas automaticas de doble cañon que nos dieron a Andrea y a mi en Colonia, mi nueva especie, ahora que soy una de ellos, parecen mas ligeras en mis manos y disparo con facilidad, haciendo algunas piruets para esquivar los poderosos zarpasos que lanzan, debo patear a uno y derribarlo para dispararla ya en el suelo, noto la mirada de preocupacion de mi novio, su otro lado esta ahorita, pero aun asi, sigue preocupado por mi.

-¿Alguien pidio langosta para cenar?-brome mientras despedaza a otro ragnarok que queda atrapado entre su escopeta y un arbol.


-Invitame a esa cena-respondo con una sonrisa, atrapada entre las garras de multiples ragnaroks

Los que no son derribados por el fuego del grupo de Sasha, son derribados por mis pistolas, pronto nos damos cuentas que las cantidad de mutantes disminuye rapidamente, cuando el ultimo cae, disparo a la cabeza del mutante, jadeante, mientras me acurruco en los brazos de mi demonio particular cuando el corre a abrazarme, Sasha se me acerca y sonrie.

-Vaya pareja, son brutales ustedes dos, me alegra que estan de nuestro lado- dice con su voz de niña, 


-Te uniste al bando correcto-aclara mi demonio

Ella sonrie suavemente y rie, su grupo lentamente se retira, caminando ya sin el camuflaje pues si algun enemigo quisiera atacarnos, ya lo habria hecho, yo simplemente cierro los ojos, mientras camino junto a Jesus, el sonrie.



Al llegar todos los grupos han vuelto, parecemos agotados realmente, Andy simplemente me mira con expresion de nerviosismo, tuvimos algunas bajas, y dirigo una pequeña ceremonia en su honor, incluso, una niña pequeña  abraza a Andy mientras lo hago, es la hija de un soldado caido en el combate de los almacenes, ella la abraza con fuerza mientras marcados sus nombres en el muro, hemos puesto un contador, ha habido exactamente 450 000 muertes contadas desde el principio de las crisis, pero fueron muchas mas, los UIAZ calculan que deben quedar menos de un millon de personas alrededor del mundo, eso quieres decir que la cifra de muertos es de mas 7,999 millones de personas, duele saberlo, la general Joy intenta sonrie mientras anuncia.

-Ha sido un dia largo soldados, y habitantes de Xibalba, la mejor forma de cuidar el recuerdo de nuestros seres queridos perdidos, es celebrar como lo hariamos si estuvieran aqui-

Algunas personas lloran otras aplauden, nosotros, nos aseguramos que Aura este dormida para volver a casa,  completamente exaustos, ponemos el arbol, y bajo este, el enorme oso de peluche que Andy y yo escogimos para ella, intercambiamos una mirada de complicidad, y ternura quizas para muchos el mito del niño dios sea algo tonto de mantener desde de la crisis, pero para nosotros, fue parte de nuestra infancia y queremos conservarlo intacto para nuestra pequeña






Al llegar a nuestra peculiar casa, Jonathan me abraza por los hombros y aparta un poco mi blusa, hago una mueca al sentir su respiracion, ese gesto, normalmente erotico me obliga a cerrar los ojos, pues logra ver la marca enrojecida del acido causada por la "mother". al verla murmura con su clasica voz en un ronco susurro.

-Debemos curar eso, ¿Porque no me lo habias dicho?-

-Siempre me cuidas, no queria preocuparte-murmure como una niña chiquita


-Eso es lo que quiero hacer siempre-

Toma una gasa con un secante antiseptico, y abre mi blusa suavemente quitando boton por boton, sus dedos son torpes pero hay algo delicioso en esa torpesa, pues es pura fuerza contenida, se que podria aplastarlos, romper la blusa a la mitad si quisiera, al dejar descubierto el brasier de encajes color tinto, lo oido soltar un jadeo suave, no quiero admitirlo, pero se que me desea, tanto como yo a el, sonrio para mi interior mientras la tomo la mano, y le doy un suave beso en los dedos.

-Apesar que me cuidas demasiado, me gustan tus manos-murmuro suavemente

El aprieta los labios, desde el aeropuerto, no nos hemos vuelto a besar, solo algunas amorosas caricias furtivas y no puedo sopor mas eso, lo dejo vendarme con mucha lentitud, pues el acido ha dejado mi piel roja, y extremadamente sensible, cuando termina me acerco, y termino de quitar mi uniforme, antes de besarle apasiondamente, apretandome contra su cuerpo, por fin, logro notar que he roto su autocontrol, pues me empuja con suavidad hacia la cama, antes de seguir, me llevo un puñado de pastillas a la boca, el sabe lo que son.................Amantidina, pero no dice nada, solo besa mi cuello, y en el momento en que sus dedos rompen el fino elastico, tierno, pero a la vez salvage, cuelgo mis brazos de su cuello, y cierro los ojos, abandonandome al deseo que sentimos, solo escuchando nuestras respiraciones agitadas y nuestros corazones latiendo juntos.