martes, 31 de julio de 2012
Cap.VIII (La despedida.)
11 de noviembre de 2020 08:00hrs.
Mercado de tablas,Miravalle, Guadalajara.
Apesar de no haber dormido, citee a los demas soldados lo mas pronto posible, esperando a que despertaran bien todos, le insiste a Jessy que durmiera un poco mas, asi que era la unica ausente, intente exponer los resultados de la necropsia de la manera mas sencilla posible, sin perder el respeto a la humanidad que hubieran tenido las mujeres antes de convertirse en las bestias que habian cobrado la vida de Anotonio y dejado la base hecha un desastre.
-Buenos dias soldados, ayer por la tarde tuvimos un incidente altamente peligroso que cobro la vida de nuestro comandante y nos causo una profunda pena, pese a las primeras sospechas de que una mordida habia pasado desapercibida por los controles sanitarios, debo explicar que esto el absolutamente mentira, por imposible que esto suene la necropsia arrojo que las mujeres fueron violadas por infectados antes de ser rescatadas por nuestros oficiales en el edificio de la expo, se les pide que en lo sucesivo busquen señales de abuso antes de traer supervivientes que hayan estado en la cuidad-
El medico militar con el que habia tenido los roces por curioso en la clinica levanto la mano y dijo.
-Yo antes de la crisis tenia la especialidad de gineco-obstetricia, puedo realizar examenes a todas las mujeres que lleguen a la base-
-Permiso concedido, Javier, solo asegurate de no propasarte en esos examenes, las supervivientes ya han sufrido lo suficiente-
Terminando la junta vi a Jessy parada en la puerta de mi cuarto, sus ojos lucian hinchados pero despedia un aire de firmeza que la hacia parecerse un poco a Antonio.
-Buena espocision- sususrro.
-Lamento todo esto debi preverlo- dije sinceramente arrepentido.
-Nadie podia, la verdad es que todo esto es un infierno, nadie sabe como van a evolucionar el virus y yo no se si podre liderar esta tropa-
-Lo haras bien, ya veras, eres fuerte he inteligente-
-Eso espero-
Ella me abrazo muy fuerte y susurro a mi oido un dulce.
-Gracias-
En eso estabamos cuando el operador del radio grito desde su mesa de trabajo.
-Transmicion entrante-
Jessy y yo corrimos hacia alli y Jeesy le ordeno.
-Conecta el altavoz-
La señal era debil y apenas y se entendia pero se escuchaba bien.
-Aqui superviviente en Comala, Colima, estoy en el centro vacacional " Laguna la Maria", intentaba viajar hacia la sierra pero me fue imposible, estoy rodeada de infectados y estos no tardan en encontrarme, solicito refuerzos, por favor respondan-
Jessy tomo el microfono y dijo.
-Aqui base de la resistencia de Guadalajara, intentaremos mandar a alguien pero no podemos prometer nada-
La comunicacion se corto unos segundos despues, Jessy miro a los hombres uno por uno antes de preguntar.
-¿Algun voluntario?, un paso al frente-
Al ver que todos se quedaban quietos, di un paso yo, Jessy me miro confundida.
-Tu, no, no quiero perderte tambien-
La abrace y le dije.
-No me perderas, volvere pronto, pero tu padre creia en apoyar a los sobrevivientes, no podemos darle la espalda a eso-
-Esta bien, solo hazme un favor si, cuidate y regresa amigo mio-
-Te lo prometo, volveremos a vernos.-
Despues de eso le ordeno a sus hombres que me prepararan un vehiculo, decidimos que partiria en la mañana asi que dormimos una vez mas juntos antes de mi partida, casi no hablamos, solo disfrutamos de la presencia del otro, al amanecer, mi vehiculo estaba cargado y listo asi que no debiamos esperar mas, antes de irme Jessy me dijo.
-Quiero que ademas de tu arsenal normal-señalo una Wildey Magnum y un Steyr AUG que llevaba en el vehiculo- te lleves esto-
Me entrego la Tommy que habia colgado en mi cuarto y un revolver Peacemaker, ambos con sus respectivas cajas de balas.
-No puedo llevarmelos,son tuyos-
-No Gustavo, son tuyos para que te cuiden y podamos volver a vernos-
Despues de eso se me acerco despacio y me deposito un suave beso en los labios, que pronto se volvio una calida muestra de la angustia que sentia por mi partida. cuando al fin me solto tan solo logro murmurar un triste.
-Adios amigo-
Subi al auto y puse la primera, al poco de conducir vi un disco en el asiento del pasajero, lo puse en el reproductor y comenso a sonar mi cancion favorita " Epifania" de La Oreja de Van Gogh, cantada por la dulce voz de Jessy. Los ultimos acordes que me acompañan hacia el horizonte me hacen un nudo en la garganta.
"con este epitafio
se va nuestra amistad"
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